El cartón es un material prometedor en cuestión de empaquetado de alimentos para líneas aéreas: es de bajo peso, puede aplicársele un revestimiento barrera, y se le puede dar un acabado que satisfaga el grado de elegancia y la sensación de calidad requeridos. Scandinavian Airlines (SAS) introdujo recientemente un nuevo empaquetado de alimentos fabricado con cartón Folding Incada.
"Es preciso tener en cuenta un sinnúmero de factores al diseñar el empaquetado para alimentos servidos a bordo", explica Gustaf Öholm, Administrador Principal, Departamento de Conceptos, Servicios y Ventas A Bordo de SAS. "Este debe ser ligero, presentar favorablemente los alimentos y ser agradable al tacto. También debe abrirse con facilidad y, claro, debe mantener las intenciones de nuestra cocina en el momento de llegar al pasajero".
La solución anterior de la aerolínea no era suficientemente buena y SAS decidió desarrollar, por lo tanto, una nueva forma de empaquetado para alimentos a la altura de las múltiples exigencias de calidad y presentación.
Entre las variables importantes del material figuraban la sensación al tacto, el revestimiento de la superficie y la capacidad para aceptar color.
El nuevo empaquetado se está usando ahora para las comidas vespertinas de los pasajeros de la sección SAS Plus en casi todas las rutas fuera de la región nórdica. Otra nueva particularidad es que, salvo un chocolate, todo el contenido lo produce en un mismo lugar un equipo especializado. SAS considera que esto elevará y uniformará la calidad de los alimentos.
El proveedor de empaquetado de SAS trabajó en colaboración con Elanders, empresa que desarrolló anteriormente un empaquetado convertible en abono orgánico y de peso considerablemente más ligero para Malmö Aviation. SAS encargó crear un empaquetado ligero, de uso fácil, que presentara los alimentos con elegancia.
"Seleccionamos Incada de Iggesund por su rigidez y revestimos la parte interior con una barrera de polietileno teñido de negro. En la parte exterior del empaquetado hicimos impresión en negro y luego nos empeñamos en localizar una película transparente que capturara la condensación al mínimo a fin de crear una óptima impresión visual de la comida", explica Tony Norén, de Elanders.
Incada se elabora en la fábrica de Iggesund Paperboard en Workington, Inglaterra. Ahí, Iggesund ha modificado su abastecimiento energético de manera radical, pasando del gas natural de origen fósil a la biomasa. La nueva planta termoeléctrica de cogeneración de la fábrica es el resultado de una inversión de 108 millones de libras y la reducción de emisiones de origen fósil equivale a retirar de la circulación 65 000 automóviles en un año.
"Por supuesto, el aspecto ambiental es también un factor primordial en nuestra decisión", concluye Gustaf Öholm. "Como es obvio, consideramos importante que nuestro empaquetado de alimentos tenga un estándar alto en lo tocante al medio ambiente".
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